El acompañamiento espiritual en un centro educativo es una modalidad de servicio pastoral ofrecido por el centro que trata de fomentar la explicitación y la escucha de cuestiones que no tienen que ver con los aspectos académicos, sino con aspectos de la vida profunda de la persona, sus relaciones con el entorno o su propia vida espiritual.
Este acompañamiento, prolongado o no en el tiempo, según circunstancias o personas, no sólo está dirigido a los alumnos y alumnas, sino a profesores, profesoras, padres y madres. todo ello para que la persona se conozca mejor o de una manera diferente, además de discernir y avanzar por el camino de la vida, cada uno a su manera. En ningún caso se trata de un Sacramento de la Reconciliación encubierto o de una sesión de terapia psicológica.